Se utilizaron los galpones ala c y d del puerto y se dispusieron diferentes stands: artesanos de Ingeniero White, Barrio Saladero, Boulevard, 26 de setiembre y Bahía Blanca; puestos de comida casera de vecinos aledaños al puerto. Hubo muestra de la Armada Argentina, del Museo de la Aviación Naval Argentina y de la Delegación Naval Bahía Blanca; stand de Infinito por Descubrir, iniciativa del Ministerio de Educación de la Nación que brindó entornos de aprendizaje donde la curiosidad fue la protagonista y puso al alcance herramientas que les permitieron a los chicos experimentar y explorar; souvenir intervenidos con la tradicional técnica de serigrafía que impulsa el Museo Ferrowhite, museo taller que aloja herramientas, útiles recuperados, el relato y la experiencia de vida de los propios trabajadores ferroviarios; stand de los Bomberos Voluntarios de Ingeniero White, una querida y emblemática institución local; un espacio de diálogo abierto con algunos de pescadores artesanales compartiendo sus historias y tejido artesanal de redes y también generamos un espacio propio con la temática aves playeras donde se reforzó el conocimiento de la fauna de nuestro entorno portuario. Un espacio donde a través de talleres de plástica la comunidad pudo saber más de las especies que habitan nuestro humedal y de aquellas que en su proceso migratorio visitan el puerto.
Además, presentamos un galpón lúdico con la organización civil Piedra Libre, que fomentaron el desarrollo de la recreación y el juego desde un lugar de construcción y aprendizaje y también participaron algunos integrantes de los actuales campeones de la liga de desarrollo del plantel de Bahía Basket, con su Programa Bahia y la comunidad.
Las exhibiciones náuticas tuvieron veleros y optimist del Club Náutico Bahía Blanca, con el objetivo de difundir la práctica del deporte náutico en sus variadas modalidades; simulacros de control de derrame a cargo de Lanchas del Sur, una empresas de más de 60 años en prestar servicios en todas las operaciones portuarias y de llevar adelante el plan nacional de contingencias de nuestro ámbito portuario y antes de caer la tarde, presenciamos los impactantes chorros de agua que los remolcadores lanzaron a modo de saludo y que entretuvo a la comunidad que se agolpaba a la baranda náutica. Los remolcadores pertenecen a Trans Ona que opera en el puerto través de la Agencia Marítima Martín.
Una de las contantes protagonistas del festival fue la Corbeta Ara Rosales, embarcación multipropósito de la Armada Argentina. Su Capitán, comandante Ricardo Horacio Orupe, junto al resto de la tripulación recibió a cientos de familias que quisieron conocer el interior y cubierta de la corbeta que actualmente se aloja en la Base Naval Puerto Belgrano.
En la extensión de la plazoleta se dispusieron food truck con diferentes opciones gastronómicas para toda la familia y en una de las calles de ingreso se pudo apreciar una importante exposición de autos antiguos.
La música formó parte de los festejos donde se pudo apreciar todo el talento de bandas y grupos de danza de niños, adolescentes y adultos de Ingeniero White y de Bahía Blanca, algunas dando sus primeros pasos y otras con gran trayectoria, pero en todos los casos con gran entrega artística. Todos los géneros musicales estuvieron presentes. Los cierres artísticos del Festival recayeron en el Grupo Universitario, Zoom, homenaje a Soda Stereo y el nutrido grupo de Pecadora.
Sin lugar a duda, fue una experiencia de fortalecimiento del vínculo con la comunidad, considerando que el puerto no es solamente un ámbito para el desarrollo económico e industrial, sino también un espacio recreativo donde se pueden llevar adelante actividades para seguir trabajando juntos, en la construcción y desarrollo de nuestra Ciudad-Puerto.